Paseo por las huellas que dejan tus zapatos, me escondo para mirarte en el humo de tu cigarro, sonrío por tener esta amistad contigo aunque quizás deba llorar porque nunca seremos más que amigos. Sigo en el puto proyecto de hacerte feliz, te espero en el vaivén de tus caderas, espera que yo llegué para desnudarte, haría de esta noche una leyenda y tienes que estar preparado para entregarte. Escúchame, aquí sólo estoy midiendo la distancia hasta tu corazón aunque tú no lo sientas eso lo sufro yo. Escúchame, sigo pensando en ti, vivo de tus recuerdos, maldigo mi existir, nada tiene sentido…

Te espero cada noche en el mundo de los sueños, allí no sé dónde empiezan mis manos y acaba tu cuerpo, siento no sentir que ya no quiero despertar, juego con las palabras que salen de tu boca, vacilo entre tus labios, te invito a otra copa que manchan tus besos.